Cuando Jesús Venga, ¿Realmente Montará En Un Caballo Blanco?

POR MARK HITCHCOCK

Apocalipsis 19:11-19 describe el glorioso regreso del Rey de reyes a la tierra. Cuando venga, lo hará sobre un semental blanco. Además, los que regresen con Cristo desde el cielo también montarán en caballos blancos (19:14). ¿Son estos caballos criaturas reales y celestiales, o son sólo un símbolo de la victoria de Cristo?

A favor de la visión no literal está el hecho de que Apocalipsis 19 contiene bastante lenguaje que no esperamos que se cumpla literalmente. Por ejemplo, Jesús aparece con una espada afilada que sale de su boca «para herir con ella a las naciones» (19:15). La espada, un símbolo bíblico común para la Palabra de Dios, simboliza claramente la palabra hablada de Jesús, que empleará para matar a sus enemigos (2 Tesalonicenses 2:8; Hebreos 4:12). Los vencedores militares en la antigüedad montaban caballos blancos como símbolo de su conquista. El caballo blanco de Apocalipsis 19 podría entenderse como un símbolo llamativo de la abrumadora victoria que logrará Jesús. A diferencia de los antiguos conquistadores, que montaban un caballo blanco después de su victoria, Jesús montará un caballo blanco en previsión de la victoria. Su éxito es seguro.

Aunque la interpretación simbólica es una opción viable, la visión literal también tiene un buen apoyo. Hay otros ejemplos en las Escrituras de corceles sobrenaturales. Por ejemplo, los caballos de fuego arrastraron a Elías hasta el cielo en 2 Reyes 2:11. Caballos y carros de fuego protegieron a Eliseo en Dotán (2 Reyes 6:13-17). E incluso Satanás tiene una caballería demoníaca formada por criaturas feroces (Apocalipsis 9:16-19). No es inconcebible, entonces, que Dios tenga algunos caballos celestiales especiales que llevarán a Cristo y a su pueblo de vuelta a la tierra cuando el Señor regrese.

Mi preferencia es fusionar estos dos puntos de vista. No veo ninguna razón, a la luz del precedente bíblico, para rechazar la idea de caballos celestiales literales. Pero la imagen de Cristo en un caballo blanco habría sido claramente entendida por la audiencia original como un símbolo de victoria militar. De cualquier manera, el mensaje de Apocalipsis 19 es evidente: Jesús aplastará a sus enemigos. Su victoria está garantizada.