El Remanente Judío Huye de Jerusalén

POR RON RHODES

La abominación desoladora se describe en el discurso de Jesús en el monte de los Olivos como una gran señal de advertencia que requiere una acción inmediata. Jesús instó:

¹⁵Por tanto, cuando veáis la abominación de la desolación, de que se habló por medio del profeta Daniel, colocada en el lugar santo (el que lea, que entienda), ¹⁶entonces los que estén en Judea, huyan a los montes; ¹⁷el que esté en la azotea, no baje a sacar las cosas de su casa; ¹⁸y el que esté en el campo, no vuelva atrás a tomar su capa. ¹⁹Pero, ¡ay de las que estén encinta y de las que estén criando en aquellos días! ²⁰Orad para que vuestra huida no suceda en invierno, ni en día de reposo, ²¹porque habrá entonces una gran tribulación, tal como no ha acontecido desde el principio del mundo hasta ahora, ni acontecerá jamás. (Mateo 24:15-21).

Cuando el anticristo profane el templo judío de Jerusalén, Jesús insta a los judíos que vivan allí a que no se preocupen por sus pertenencias personales. Su única preocupación debería ser salir de la ciudad con la mayor rapidez. El tiempo que se dedique a recoger las pertenencias podría suponer la diferencia entre la vida y la muerte. Jesús advierte que la angustia está a punto de aumentar de forma dramática y rápida.

Los judíos que escapen de Jerusalén huirán a los desiertos y montañas (Mateo 24:16), tal vez a Bosra/Petra, a unos 130 kilómetros al sur de Jerusalén. Otros sugieren Moab, Amón o Edom al este. Dios promete proteger a este remanente durante los últimos tres años y medio del período de tribulación.

Apocalipsis 12:13-17 proporciona los detalles:

¹³Cuando el dragón vio que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al hijo varón. ¹⁴Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila a fin de que volara de la presencia de la serpiente al desierto, a su lugar, donde fue sustentada por un tiempo, tiempos y medio tiempo. ¹⁵Y la serpiente arrojó de su boca, tras la mujer, agua como un río, para hacer que fuera arrastrada por la corriente. ¹⁶Pero la tierra ayudó a la mujer, y la tierra abrió su boca y tragó el río que el dragón había arrojado de su boca. ¹⁷Entonces el dragón se enfureció contra la mujer, y salió para hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesús.

La mujer en este pasaje representa a Israel. La imagen tiene sus raíces en el Antiguo Testamento, donde Israel es a menudo vista como la esposa de Dios (Isaías 54:5-6; Jeremías 3:6-8; 31:32; Ezequiel 16:32; Oseas 2:16).

El niño nacido de la mujer (es decir, nacido de Israel) es Jesús. (Jesús era de ascendencia judía: Mateo 1:1; 2 Timoteo 2:8; véase también Romanos 1:3; 9:4-5).

El dragón que busca devorar al niño probablemente alude a la masacre de niños varones ordenada por Herodes (Apocalipsis 12:4; Mateo 2:13-18; Lucas 4:28-29). El diablo aparentemente estaba detrás de estas circunstancias en su intento de matar a Jesús, y no tuvo éxito. Apocalipsis 12:5 nos dice que el «niño» fue finalmente «arrebatado hasta Dios», es decir, ascendió al cielo después de su resurrección (Hechos 1:9; 2:33; Hebreos 1:1-3; 12:2).

Satanás, sabiendo que le queda muy poco tiempo (solo tres años y medio), busca perseguir a Israel (los judíos) con furia (Apocalipsis 12:12-13). Pero Dios le proporciona «dos alas de la gran águila para que pudiera volar de la serpiente al desierto» (Apocalipsis 12:14). En la Biblia, las alas a menudo representan protección y liberación (Salmo 91:4; Isaías 40:31). Dios afirmó una vez a los antiguos judíos: «Vosotros mismos habéis visto lo que hice a los egipcios, y cómo os llevé sobre alas de águila y os traje a mí» (Éxodo 19:4). Las «dos alas» en Apocalipsis 12:14 apuntan a la liberación sobrenatural de Dios de un remanente judío.

Dios preservará a los judíos por «un tiempo, tiempos y la mitad de un tiempo». Esto se refiere a los últimos tres años y medio del período de tribulación (Daniel 7:25; 12:7). Un tiempo equivale a un año. Tiempos equivalen a dos años. La mitad de un tiempo equivale a medio año.

Las Escrituras proféticas nos dicen que «la serpiente arrojó de su boca agua como un río tras la mujer, para arrastrarla con una inundación» (Apocalipsis 12:15). Satanás puede causar una inundación literal de agua para desalojar y destruir a los judíos. O tal vez la inundación es metafórica, refiriéndose a un ejército impulsado por Satanás que avanzará rápidamente contra los judíos. Incluso podría referirse a un derramamiento de odio: el antisemitismo.

Sea como fuere, la tierra, bajo la providencia de Dios, acudirá en ayuda de los judíos (Apocalipsis 12:16). Si el diluvio es agua literal, tal vez Dios haga que la tierra se abra y se los trague. Del mismo modo, si el diluvio es un ejército que avanza rápidamente, tal vez Dios haga que la tierra se abra a través de un poderoso terremoto para tragarse a los atacantes (Mateo 24:7; Apocalipsis 6:12; 8:5; 11:13, 19; 16:18).

Nunca olvides las dos promesas de Dios a los judíos:

1. «Ninguna arma forjada contra ti prosperará», ni siquiera el agua, literal o metafóricamente (Isaías 54:17).

2. « He aquí, no se adormecerá ni dormirá el que guarda a Israel.» (Salmo 121:4-5).

DATOS BREVES SOBRE EL OBJETIVO CONTINUO DE SATANÁS DE DESTRUIR A LOS JUDÍOS

Satanás ha intentado destruir a los judíos de forma persistente tanto en los tiempos del Antiguo como del Nuevo Testamento. Esaú intentó matar a su hermano Jacob, que se convertiría en el padre de las 12 tribus de Israel. Cuando nació Moisés, el faraón egipcio ordenó la ejecución de todos los bebés judíos varones nacidos en Egipto. Obviamente, Israel no existiría si Jacob o Moisés no hubieran sobrevivido.

Haman planeó el exterminio de los judíos. Si no hubiera sido por la revelación de este horrible complot por parte de Ester, el pueblo judío podría haber perecido.

Cuando nació Jesús, el rey Herodes se dedicó al infanticidio judío para intentar asesinar al niño Jesús. No es de extrañar que Jesús llamara a Satanás «asesino desde el principio» (Juan 8:44). Al parecer, Satanás estaba detrás de todas estas actividades asesinas.

PREGUNTAS FRECUENTES

¿Es posible que la persecución y el martirio de los judíos por parte de Satanás durante el periodo de tribulación se hayan diseñado para impedir la segunda venida?

Es posible. Jesús no regresará hasta que el pueblo judío esté en peligro en el Armagedón, y hasta que los líderes judíos clamen por la liberación del Mesías divino (Zacarías 12:10). En su pensamiento pervertido, Satanás puede razonar que, si puede destruir a los judíos, puede evitar que clamen al Mesías divino y, por lo tanto, evitar la segunda venida de Cristo, salvándose así de la derrota.

¿Está motivada por Satanás la actitud asesina del anticristo hacia los judíos?

Creo que sí. Segunda de Tesalonicenses 2:9 nos dice que el anticristo opera «por la actividad de Satanás». Apocalipsis 13:2 nos dice que Satanás «dio su poder» al anticristo.

Así como Satanás odia a los judíos y quiere asesinarlos, el anticristo odiará a los judíos y tratará de asesinarlos. Aparentemente, Satanás perseguirá a los judíos a través del anticristo (Mateo 24:15-21).

¿El anticristo también atacará a los cristianos durante el periodo de tribulación?

¡Por supuesto! Apocalipsis 13:7-10 nos dice que, al anticristo, impulsado por Satanás, «se le permitió hacer guerra contra los santos y vencerlos» (véase también 2 Tesalonicenses 2:9). Un pasaje paralelo es Daniel 7:21, que revela que el anticristo «hizo guerra contra los santos y prevaleció sobre ellos». Observe cómo estos versículos nos dicen que el anticristo los conquistará y prevalecerá sobre ellos. Este lenguaje revela que habrá muchos mártires entre el pueblo de Dios durante el período de tribulación (Apocalipsis 6:9-11).

GRANDES PENSAMIENTOS PARA HOY

• El anticristo profanará el templo judío.

• Esta profanación será una señal de advertencia de que la persecución catastrófica contra los judíos es inminente.

•Por lo tanto, Jesús insta a los judíos de Jerusalén a salir inmediatamente y buscar refugio en el desierto, donde Dios velará providencialmente por los supervivientes.

•También se producirá una persecución a gran escala de los cristianos (los «santos»).

VERDADES TRANSFORMADORAS PARA HOY

•Aunque todavía no estamos en el período de tribulación, los cristianos son, sin embargo, blanco de persecución —incluso de martirio— en algunas partes del mundo. Incluso en países con libertad religiosa, los cristianos y los valores cristianos son ridiculizados y condenados al ostracismo. No es momento para que los cristianos sucumban a la horrible enfermedad conocida como no-rocka-boatus (juego de mesa para niños). Necesitamos cristianos valientes que eviten las disputas, pero que estén bien preparados para luchar por la fe (Judas 3). ¿Serás uno de estos cristianos?

•Dios velará providencialmente por el remanente judío durante la segunda mitad del período de tribulación. Al decir providencialmente, me refiero a la «soberanía de Dios con un propósito». Tú y yo debemos aprender a confiar en que Dios también vela providencialmente por nosotros (Salmo 23; Mateo 28:20; Hebreos 13:5). Este es un gran antídoto para la ansiedad.