¿Necesitamos Recursos Adicionales Para Comprender la Biblia?

POR JACK HUGHES

¿Necesitamos recursos bíblicos adicionales para conocer el contexto histórico y las costumbres culturales que nos permitan comprender la Biblia? En cierto sentido, la Biblia y el Espíritu Santo son suficientes para comprender la Palabra de Dios, su significado y su aplicación. Sin embargo, el significado de los textos a menudo se puede comprender con mayor precisión cuando conocemos sus contextos históricos y culturales.

Por ejemplo, si no conoces la historia de los samaritanos, no entenderás por qué los discípulos le preguntaron al Señor si podían ordenar que cayera fuego del cielo y los consumiera (Lc 9:54). No entenderás el significado de que Jesús convirtiera al samaritano en el héroe de la parábola del «buen samaritano» (Lc 10, 30-37). Un buen samaritano era un oxímoron para los judíos. No entenderás el significado de que Jesús hablara con la mujer samaritana en el pozo (Jn 4, 7-38).

Sí, aún puedes obtener significado y aplicación de la Biblia sin recursos extra bíblicos, pero si comprendes la historia centenaria y la animosidad entre los judíos y los samaritanos, entonces puedes comprender ciertos textos mejor, con mayor precisión.

Otros textos son difíciles de entender si no se conocen diversas costumbres culturales, por ejemplo, las costumbres matrimoniales, cómo se podaban las vides, cómo se relajaba la gente en los tejados de sus casas por la noche, etc. Por lo tanto, un principio hermenéutico sabio, o un principio de estudio bíblico que hay que practicar, es consultar libros o comentarios que hablen de las costumbres culturales y el contexto histórico.

Conocer la Biblia en su propio contexto cultural e histórico puede ayudarnos a lidiar con cosas de nuestra propia cultura y contexto. Hace un tiempo hice un video sobre los extraterrestres y la Biblia para abordar un tema muy candente en nuestra cultura actual. La Biblia enseña que a medida que avanzamos hacia la segunda venida, la actividad satánica/demoníaca aumentará. Satanás utilizará «todo poder, señales mentiras y prodigios para engañar» (Mt. 24:24; 2 Tes. 2:9; Ap. 19:20).

– Está claro que no debemos ignorar las artimañas de Satanás (2 Cor. 2:11).

– Está claro que nuestra batalla no es contra sangre y carne, sino contra las fuerzas demoníacas de las tinieblas en los lugares celestiales (Efesios 6:12). Es asombroso pensar que nuestra batalla principal en la vida cristiana es contra los demonios. ¡Selah! La Biblia nos dice que los ángeles, los demonios y Satanás son seres reales y literales. Estamos en una batalla real y literal, que se libra en el reino espiritual, en otra dimensión.

Sin embargo, el mundo habla de los ángeles santos y los demonios como «NHI» o inteligencias no humanas, o «seres interdimensionales», o «extraterrestres», o «seres extraterrestres», etc. El mundo, cuyo dios es Satanás, no quiere dar ninguna credibilidad a la Biblia. Por eso se utilizan nombres diferentes para describir las realidades bíblicas, por ejemplo, ángeles y demonios.

Hoy en día se está produciendo un gran cambio en algunos campos de la ciencia, ya que muchos se están dando cuenta de que «no estamos solos», de que existen «inteligencias no humanas» fuera de la humanidad. Esto está sacudiendo la cosmovisión de muchos materialistas. Por supuesto, si lees la Biblia, conoces la verdad. Dios creó seres vivos, serafines, querubines, principados, potestades, autoridades, ángeles santos, ángeles caídos, Satanás, demonios, espíritus malignos, etc. Existe un reino espiritual, un cielo y un infierno.

Satanás, que no quiere dar credibilidad a la Palabra de Dios, hace que sus hijos utilicen términos como «extraterrestres», «seres extraterrestres», «inteligencia no humana» o «seres interdimensionales» en lugar de hablar de Dios, los ángeles y los demonios. Recordar, todos los incrédulos:

· Son de su padre, el diablo (Jn. 8:44).

· Todos los incrédulos están cautivos por Satanás para hacer su voluntad (2 Tim. 2:26).

· Todo el mundo de los incrédulos está bajo el poder del maligno (Jn. 5:19).

· Satanás está obrando en los hijos de desobediencia (Ef. 2:1-3).

· Satanás ha cegado las mentes de los incrédulos (2 Cor. 4:4).

· Satanás engaña a todo el mundo de los hombres incrédulos (Ap. 12:9).

Satanás ha promovido una visión materialista radical del mundo que intenta convertir la ciencia en un dios al que adorar. Se ha lavado el cerebro a la gente para que solo piense de forma materialista y se burle de la realidad y el significado del reino espiritual. Sin embargo, el espejo de este engaño se está rompiendo. Satanás, que sigue queriendo desviar la atención de la gente de la Biblia, nos tienta a mirar hacia el «espacio exterior» y los «seres extraterrestres». Quiere que la gente niegue todo lo que no se puede ver, sentir, saborear, tocar u oler. Su mayor mentira es que Él no existe. Satanás está trabajando para mantenerse oculto el mayor tiempo posible.

Muchos de los miembros de la élite están detrás de las cámaras, en la oscuridad, promoviendo y participando en prácticas satánicas y ocultistas, creyendo en doctrinas de demonios (1 Tim. 4:1-3; Santiago 3:14-15), engañando y siendo engañados (2 Tim. 3:13).

Hoy en día, muchos participan en lo que se denomina protocolo CE5, desarrollado originalmente por la CIA, para comunicarse con los NHI (demonios) e intentar obtener una ventaja militar. Al practicar el protocolo CE5, te abres a la posesión demoníaca o «canalización», es decir, a permitir que un demonio se comunique contigo o hable a través de ti. Es una locura que el dinero de los contribuyentes se destine a prácticas ocultistas en un intento de obtener una ventaja militar sobre China, Rusia, etc. No es de extrañar que los nazis estuvieran muy interesados en el ocultismo. Después de la guerra, trajimos a los nazis en la Operación Paper Clip, les permitimos seguir siendo nazis y se convirtieron en la base y la columna vertebral de muchos de nuestros proyectos militares secretos. Otros países han hecho lo mismo.

Existe una larga historia de programas de «visión remota», que no son más que programas de proyección astral. Como era de esperar, Satanás está obrando en los hijos de la desobediencia. Sus hijos hacen sus obras (Jn. 8:44).

La idea de los alienígenas o seres extraterrestres de otros planetas es falsa, una cortina de humo para desviar la atención de la gente de la Palabra de Dios y del reino espiritual. La Biblia enseña que la creación fue hecha para la humanidad hace unos 6-10 mil años. No existen «millones y miles de millones de años». La vida nunca ha evolucionado en la Tierra ni en otros planetas. La evolución es una mentira. La vida no proviene de la no vida. Todo no proviene de la nada. El orden no proviene del caos. El diseño no es un accidente. Nada es «prehistórico», ya que la Biblia nos dice lo que sucedió desde el principio de la creación.

Con los telescopios Hubble y James Webb y, más recientemente, con la cámara más grande del mundo en el Observatorio Vera C. Rubin, los astrónomos se están dando cuenta de la inmensidad del universo, que es más grande de lo que jamás podrían haber imaginado. Razonan que, dado que hay tantas estrellas y planetas, también debe haber vida en otros planetas. Sin embargo, la Biblia describe el poder de Dios al crear las estrellas en solo cinco palabras: «Hizo… también las estrellas». Lo importante no es lo grande que es el universo, sino lo grande y poderoso que es Dios, que lo creó. Todo el universo es como un átomo en la infinitud del ser de Dios. Los astrónomos seculares no comprenden el significado del universo aparentemente infinito. El Salmo 19:1 dice: «Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos». La creación proclama la gloria del Creador, no el Big Bang.

También sabemos que no hay seres extraterrestres en otros planetas porque Apocalipsis 21:1 dice que Dios destruirá su creación, el universo, esta creación actual, para que pase con un estruendo (2 Pedro 3:10-12). Para evitar que la gente se centre en lo que dice la Biblia, los extraterrestres de otros planetas son la forma que tiene Satanás de distraer a la gente de los ángeles, los demonios y la guerra espiritual en el reino espiritual para aquellos que actualmente viven en la tierra.

Tenemos la Palabra de Dios, que es suficiente (2 Tim. 3:15-17; 2 Pedro 1:3). No debemos temer las cosas que están sucediendo en el mundo. Jesús dijo que debían suceder (Mt. 24:6). Sin duda, muchos están engañando y siendo engañados (2 Tim. 3:13). Los cristianos deben centrarse en la Palabra de Dios y proclamar el evangelio de Jesucristo, que es el poder de Dios para todos los que creen (Rom. 1:16; 1 Cor. 1:18). Debemos buscar primero el reino de Dios y su justicia (Mt. 6:33). Podemos mirar al futuro con esperanza, porque Dios no nos ha destinado a la ira (1 Tes. 5:9-11; Ap. 3:10).

Muchos cristianos rara vez piensan en la venida de Jesucristo por Su iglesia. Pero la historia ha demostrado que, a medida que las cosas empeoran en la tierra, los cristianos esperan con esperanza el regreso de Jesús. Muchos textos nos dicen que todos los cristianos deben esperar con ansias, desear, esperar y anhelar que Jesús regrese para llevar a los creyentes a la casa del Padre, por ejemplo, Jn. 14:1-3; Rom. 8:19, 23, 25; 1 Cor. 1:7; 2 Cor. 4:18; 1 Tes. 1:10; 2 Tim. 4:8; Tito 2:13; Fil. 3:20; Col. 3:1; Heb. 9:28; 10:36; Santiago 5:7; 2 Pedro 3:11-12; 1 Juan 3:2; Judas 20-21. Mira tu vida. ¿Estás esperando con impaciencia, anhelando, aguardando y buscando a Jesús para que te rescate de la ira venidera? Si no es así, ¡deberías hacerlo!