Día: 5 noviembre 2010
Atrévete a ser como Daniel
Atrévete a ser como Daniel. Nadie diría que vivimos en un mundo de compromiso. De hecho, el compromiso a menudo se promociona como una virtud, es diplomático y razonable. Por otro lado, aquellos que se aferran a su integridad se ve tan difíciles, duros de nariz, y sin preocuparse por el bien común. Usted puede entender cómo el mundo piensa de esa manera, pero ¿no deberían los cristianos ser diferentes?
Lamentablemente, demasiados creyentes se preocupan por lo que la gente pensaría, diría, o haría si toman una postura sobre principios divinos. Así que en vez de eso, ponen en peligro sus convicciones o los mantienen bajo el amparo de la oscuridad. Si usted es uno de esos cristianos pusilánimes, o si conoce a personas que lo son, me gustaría animarle a tomar una lección de la vida de un hombre, un hombre con temple.