Día: 7 marzo 2012

Unidad ¿A Qué Costo?

Posted on Actualizado enn

clip_image002Unidad ¿A Qué Costo?

Por Tim Challies

“Mas no ruego sólo por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno. Como tú, oh Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste. La gloria que me diste les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno: yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfeccionados en unidad, para que el mundo sepa que tú me enviaste, y que los amaste tal como me has amado a mí.” (Juan 17: 20-23).

Estas palabras fueron pronunciadas por Jesús meros momentos después de celebrar la primera Cena del Señor con sus discípulos. Jesús derrama su corazón hacia el Padre, orando por Su persona, Sus discípulos y, finalmente, por todos los creyentes. En su oración por sus discípulos y por todos los creyentes El ora especialmente por la unidad, pidiendo que todos los hombres puedan experimentar la perfecta unidad disfrutado por la Divinidad. Así como el Padre, Hijo y Espíritu Santo son uno, por lo que Jesús ora para que los creyentes sean perfectamente uno que esta unidad servirá como un testimonio de la veracidad de la afirmación de Jesús de que es el Hijo de Dios. Verdaderamente la unidad merece un lugar elevado en la iglesia.

Leer el resto de esta entrada »

Seis Maneras de Dar Una Falsa Seguridad

Posted on Actualizado enn

clip_image002Seis Maneras de Dar Una Falsa Seguridad

By Michael McKinley

Como pastor, me relaciono con una gran cantidad de personas que luchan por tener confianza en la autenticidad de su conversión. Para su mente, su pecado se adhiere de cerca y sus fallos están siempre a la mano. La mayoría de las veces, me parece que estos son fieles hermanos y hermanas que necesitan consuelo y seguridad.

Pero hay otro grupo de personas en muchas de nuestras iglesias que es mucho más preocupante: los que tienen una creencia firme pero infundada de que están verdaderamente convertidos. Tal vez usted conoce ese tipo. Ellos saben las palabras adecuadas. Se quedan libres de pecado público escandaloso. Y son personas morales. Pero no tienen verdadero fruto, no hay evidencia de que el Espíritu convertidor de Dios esta obrando en ellos. Y a menudo hay un área no tratada de pecado secreto.

Leer el resto de esta entrada »