Respondiendo a las 95 Tesis En Contra del Dispensacionalismo – Tesis 82-85
Respondiendo a las 45 Tesis En Contra del Dispensacionalismo – Tesis 82-85
Por Paul Henebury
82. A pesar del compromiso de los dispensacionalistas con los judíos como importantes para el cumplimiento de la profecía y su acusación de «antisemitismo» contra los evangélicos que no ven un futuro exaltado para Israel (Hal Lindsey), en la actualidad instan a los judíos a regresar a Israel a pesar de que su comprensión de la profecía de Zac 13:8 enseña que «dos tercios de los hijos de Israel perecerán» (Walvoord) una vez que se complete su regreso.
Respuesta: Dos cosas: en primer lugar, aunque algunas personas como Lindsey (si podemos confiar en el Concilio de Nicea) acusan a otros evangélicos de antisemitismo, no todos los dispensacionalistas lo hacen. A este respecto debería consultarse Future Israel de Barry Horner o Jews, Gentiles and the Church de David Larsen. Algunos de mis antiguos profesores son eminentes dispensacionalistas (Arnold Fruchtenbaum, Robert Lightner, Thomas Ice) y todos dudan en utilizar ese término, especialmente contra la mayoría de los evangélicos que sostienen una escatología diferente. Sin embargo, una minoría de dispensacionalistas acusa libremente a otros cristianos de antisemitismo. Yo mismo he sido acusado de antisemitismo, porque creo que hoy en día debemos centrarnos donde Dios se centra: ¡en la Iglesia! Sin embargo, también he encontrado antisemitismo leve muchas veces entre algunos, no todos, amilenaristas y postmilenaristas, que creen que la Iglesia es el “Nuevo Israel” y, por tanto, están ansiosos por asignar a los israelitas étnicos del Israel actual la condición de anacronismo geopolítico. Estas personas a menudo creen lo que oyen en CBN sobre “la ocupación israelí de la tierra palestina.”
Pero como una queja ad hominem más, esta tesis no tiene nada que ver con la verdad o falsedad del Dispensacionalismo.
Sobre el segundo punto hay que señalar de nuevo que estos hombres pueden entender a un profeta del AT literalmente cuando quieren. Es una lástima que no puedan encontrar mejor uso para Zacarías 13:8 (que se refiere a la Tribulación) que como plataforma de lanzamiento para otro ataque ad hominem contra unas cuantas personas (yo nunca he instado a un judío a regresar a Israel y no conozco a ninguna persona que lo haya hecho). Patético es la palabra que me viene a la mente. ¡Seguro que hay mejores argumentos que estos!
83. En contra del argumento populista del Dispensacionalismo a favor del “apoyo incondicional” a Israel, la Biblia lo considera una forma de judeolatría, en el sentido de que sólo Dios puede exigir nuestra obligación incondicional, ya que “debemos obedecer a Dios antes que a los hombres” (Hch 5:29); y Dios incluso advierte expresamente a Israel de su destrucción “si no obedeces al Señor, tu Dios” (Dt 28:15, 63).
Respuesta: ¿Confrontaciones de bolsillo? Esta no merece ni ser enviada a John Hagee. Es ridícula. ¿De verdad leyeron estos hombres estas objeciones antes de firmarlas?
84. Contrariamente a la estructuración de la historia que hace el dispensacionalismo, basada en un principio negativo en el que cada dispensación implica “las ideas de revelación distintiva, prueba, fracaso y juicio” (Charles Ryrie), de modo que cada dispensación termina en fracaso y juicio, la Biblia establece un propósito positivo en la historia redentora, en la que “Dios no envió al Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por Él” (Juan 3:17) y “Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo” (2 Cor 5:19a).
Respuesta: No veo qué tiene que ver esto con ver la Historia Bíblica en términos de «revelación, prueba, fracaso y juicio». La Biblia puede ser vista legítimamente de muchas maneras. Este punto de vista dispensacional es uno de ellos. No aporta mucho, pero parece bastante sólido hasta dónde llega. Sacar a relucir un par de versículos positivos sobre la obra redentora de Cristo no aborda la cuestión en ningún punto. Todo cristiano sabe que Jesucristo es la única esperanza para la humanidad, pero esto no significa automáticamente que las cosas no vayan a empeorar. Si uno es postmilenarista puede parecer que contradice el optimismo terrenal inherente a esa perspectiva, pero a pesar de ello no he encontrado muchos argumentos contundentes en su contra. Suena incongruente, pero las dispensaciones no son la cúspide de la teología dispensacional. No creo que estén cerca de tener razón, pero si el Concilio de Nicea quiere ésta, por mí pueden tenerla.
85. A pesar del pesimismo del dispensacionalismo con respecto al futuro, que espera que “el siglo presente termine en apostasía y juicio divino” (Walvoord) y que “se avecinan tiempos casi increíblemente duros” (Charles Ryrie), Cristo declara que Él tiene “toda autoridad en el cielo y en la tierra” y sobre esa base nos llama en realidad a “hacer discípulos de todas las naciones” (Mt 28:18-20).
Respuesta: El dispensacionalismo está muy lejos de ser pesimista sobre el futuro si se contempla en los términos de Pablo (Tito 2:12-13; Fil. 3:20-21) o de Juan (1 Jn. 3:2). Estos textos muestran que el Regreso de Cristo desencadenará nuestra glorificación (cf. 1 Cor. 15:23, 51-57) y con ella la renovación del planeta (Rom. 8:18-25). Creemos que Jesús podría venir por nosotros en cualquier momento (1 Cor. 1:7; 1 Tes. 1:9-10; Sant. 5:8-9; cf. Jn. 14:1-3). Pero nuestra esperanza está puesta en este acontecimiento exterior.
Nuestra confianza en la Iglesia es menos eufórica. Hay una gran diferencia entre lo que la Iglesia está llamada a ser (Mt. 5:14-16; Fil. 2:15; cf. 2 Cor. 3:2-3) y lo que a menudo es (1 Cor. 1:10-11; Gal. 5:15, 26). La Iglesia se ha pasado la mayor parte de su historia rindiendo por debajo de sus posibilidades. No vemos ninguna buena razón para que esta lamentable tendencia no continúe. Aunque reconocemos plenamente la verdad de la Gran Comisión, no vemos en ella ninguna garantía de que la Iglesia vaya a «cristianizar» la tierra. Al contrario, creemos que 1 Tim. 4:1; 2 Tes. 2:3; Mt. 13:33 nos hacen esperar una apostasía de la Iglesia al final de los tiempos (por muy lejana que esté). Creemos que la expectativa optimista expresada por algunos respecto a la institución del reino venidero en la ausencia continuada del Rey se debe a una mala exposición de los textos bíblicos (véase más adelante) y a los efectos de la teología supersesionista en sus interpretaciones.